La gran sorpresa del fin de año: las campanadas de La Adrada
La noticia ha causado revuelo en todos los medios. “¡La maquinaria del reloj de Antonio Canseco vuelve a marcar la historia!”, titulan los periódicos. Este reloj, fabricado en 1890 por el célebre relojero, con sus engranajes de precisión y su imponente tic-tac, sobrevive al paso de los años. Tras décadas de descanso y esmerados cuidados por parte de los relojeros locales, será el encargado de dar las campanadas que marcarán la entrada al nuevo año. Los técnicos han estado trabajando estos últimos días ajustando la maquinaria, afinando cada martillo y cada campana, para que los sonidos resuenen con la misma claridad y solemnidad de antaño.
El día 31 de diciembre, las cadenas de televisión se conectarán con La Adrada minutos antes de la medianoche. Las cámaras mostrarán el majestuoso castillo iluminado, la maquinaria del reloj en primer plano y sus engranajes moviéndose con la misma precisión que hace más de un siglo.
Cada campanada dictará el momento exacto para que todos disfrutemos de las uvas, y, al sonar la duodécima, un estallido de júbilo y aplausos inundará tanto La Adrada como el resto de España, al mismo tiempo que el antiguo reloj de Antonio Canseco recuperará su protagonismo como símbolo del inicio del nuevo 2025.
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