Ha sido interpretado por La camerata Cantabile, en la vecina localidad toledana de La Iglesuela
La gala tiene como fin primordial la recaudación de fondos para la rehabilitación de la Ermita del Cristo de La Sangre
La Iglesuela celebró el 13 de agosto la III edición del Concierto de las Velas, organizado por La Asociación Tornapeón e interpretado este año por La Camerata Cantabile. La gala tiene como fin primordial la recaudación de fondos para la rehabilitación de la Ermita del Cristo de La Sangre, unos trabajos delicados, laboriosos y muy costosos, que ya han comenzado gracias a la ilusión y tesón de muchos de sus vecinos comprometidos en llevar a buen termino dicha reconstrucción.
Por esta circunstancia, la noche del 13 de agosto, el templo parroquial y sus alrededores, aparecían preciosamente iluminados con la luz de miles de velas, la mayor parte de ellas situadas en calles, balcones, puertas y ventanas, permaneciendo encendidas hasta la finalización del concierto. Mucha gente se acercó a esta localidad toledana de La Iglesuela, muy próxima a La Adrada, para disfrutar de este bonito espectáculo luminoso, y del bello concierto que iba a interpretar La Camerata Cantabile.
Antes de comenzar la función y tras un breve saludo de bienvenida del presidente de la Asociación Tornapeón, tomó la palabra Vanessa Satur, directora de la Camerata, que tuvo también unas palabras de agradecimiento hacia el público que llenaba el templo por acudir a escucharles, congratulándose por tener la oportunidad de colaborar en la noble causa de la reconstrucción de la Ermita del Cristo de La Sangre.
Seguidamente tuvo unas emotivas palabras de recuerdo para Nalini Satur, contralto de La Camerata y madre de Vanessa, recientemente fallecida, a la que dedicaron como homenaje este entrañable Concierto de las Velas de La Iglesuela.
La Camerata Cantabile, interpretó un programa compuesto con una selección de obras folklóricas de distintas comunidades de España (Galicia, País Vasco, Valencia, Castilla) más varias obras de zarzuela. La segunda parte del concierto estuvo dedicada a la música sudamericana, con la idea de mostrar la variedad cultural y musical de España y cómo ésta impactó en el desarrollo cultural y musical de Sudamérica. Como punto final la orquesta tocó por primera vez, una pequeña obra de Carlos Torres, titulada “Glutamato sódico”.
La brillante interpretación de La Camerata Cantabile, fue seguida con enorme interés por el público que abarrotaba la Iglesia, premiando con fuertes aplausos cada una de sus intervenciones y con una espectacular ovación al concluir el concierto.
Nota de la Asociación Tornapeón:
Quienes deseen aportar fondos para la reahbailitación de la Ermita de La Sangre, pueden hacerlo en el número de cuenta que se mostrará a continuación, o poniéndose en contacto con cualquier miembro de la Asociación Tornapeón de La Iglesuela y adquirir un Bono-Ermita.
Nº DE CUENTA DE LA CAIXA
2100 1214 07 0200030481
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