Participación y buena camaradería, notas destacadas de la jornada
La lluvia en otoño es una bendición, y precisamente un día otoñal de hermosas tonalidades, lluvioso y con agradable temperatura, es el que ha tocado este año para festejar el Día de la seta. Un encuentro que se celebró el pasado sábado 17 de noviembre, organizado como en ocasiones anteriores, por las asociaciones Amigos de La Adrada y Amigos del Jardín Botánico.
A pesar de que el campo estaba bastante mojado y que en los caminos habían muchos charcos, los participantes, en un ambiente distendido y relajado, pudieron disfrutar del precioso paisaje de La Adrada y hacerse con una estimable cantidad de lepistas, lepiotas, setas de cardo, boletus… y sobre todo de níscalos, muy abundantes bajo la hojarasca de los pinos.
A las seis de la tarde, muchas personas se acercaron a la sala de exposiciones en el Edificio Polivalente del Ayuntamiento, para observar de cerca algunas muestras de los ejemplares recogidos, tanto comestibles como venenosos, todos ellos bien identificados y diferenciados.
Y así, un año más, se cumplieron los objetivos del “Día de la seta“: compartir unas horas de paseo por el campo en agradable compañía y aprender algo sobre setas, un delicioso manjar para muchos, y un producto que para otros engendra recelo y desconfianza, por la toxicidad de algunas de sus especies.
La exposición
[qr-code size=”2″]
Visto 300 veces