Ofrenda floral y Salve en honor a la Virgen de la Yedra, carretas, caballos y baile por sevillanas, protagonizaron una jornada de color y alegría
Este año, el sol reinante acompañó al lucimiento de esta singular fiesta rociera organizada por El Ayuntamiento de La Adrada, con la colaboración de Amigos del caballo, Grupo rumbero “Al aire”, Cofradía de la Virgen de la Yedra, Asociación de Amas de casa Virgen de La Yedra, Turismo rural La Espuela y Club deportivo de petanca Villa de La Adrada.
La fiesta, que tal como nos muestran las fotografías congregó a muchas personas, tuvo su comienzo religioso hacia las 12 del mediodía con la entrada a la Ermita de la Virgen de la Yedra, de un cortejo formado por hombres, mujeres y niños ataviados al estilo andaluz, llegados en comitiva a pie, a caballo y en carretas engalanadas.
Ya en el interior del templo, tuvo lugar la tradicional ofrenda floral y la entonación de la Salve Rociera, en honor a la Virgen de la Yedra. La Salve Rociera en esta ocasión fue cantada por el grupo rumbero Al Aire con el acompañamiento de todos los allí presentes.
Luego, la comitiva, en la que participaban un nutrido grupo de jinetes a caballo, flamencos y flamencas al más puro estilo rociero, recorrió en romería las calles del pueblo hasta llegar a la Plaza de la Villa, donde todas las personas que quisieron, niños y mayores, mostraron su arte bailando por sevillanas, al ritmo de la música del grupo rumbero “Al aire”.
La plaza se llenó y hubo degustación de rebujitos, acompañados de tapitas de jamón y queso. Por la tarde mucha gente se animó a bajar a la pradera del Orejúo para comer y continuar la fiesta.
Algunos momentos de la fiesta
Combinación de fotografías de:
Isabel Jiménez y Virginia Fernández
Posando para las cámaras
Llegada de la comitiva al Parque de la Yedra
En la Ermita
Hacia la Plaza
El ambiente en la Plaza
En la pradera del Orejúo
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